La Blockchain para la gestión del agua es otro de los usos potenciales que se vislumbran en la adopción de esta nueva tecnología. En la actualidad, la gestión del agua es uno de los principales desafíos que enfrenta la humanidad. La población mundial sigue creciendo y la demanda de agua aumenta constantemente, mientras que los recursos hídricos son limitados y su disponibilidad no es uniforme en todo el planeta. En España, según el Instituto Nacional de Estadística (INE), el consumo de agua en el año 2020 fue de 2.574 hectómetros cúbicos (hm3), lo que supone un aumento del 1,1% respecto al año anterior. De este consumo, el 66,7% se destinó a la agricultura, el 13,3% a los usos urbanos, el 10,3% a la industria y el 9,7% a otros usos. Según informe de Naciones Unidas sobre el Desarrollo Agua (marzo 2018), en el mundo estamos ante un 46% de escasez de agua con una previsión de incremento al 56% en el 2050 (iagua.es, 2022). Múltiples reportes han otorgado un papel protagónico a la tecnología Blockchain como base para enfrentar diferentes desafíos ambientales, entre ellos la escasez y sequía del agua. Veamos de qué manera se está considerando aplicar la Blockchain para la gestión del agua y el desarrollo sostenible:
Blockchain para la gestión del agua
La tecnología Blockchain puede contribuir a optimizar la gestión del agua de varias maneras:
Disponibilidad del agua
En primer lugar, puede utilizarse para crear una base de datos descentralizada que permita el seguimiento de la disponibilidad y la calidad del agua en tiempo real. De esta manera, se podrían identificar zonas de escasez y contaminación y tomar medidas para remediar la situación.
Trazabilidad del comercio del agua
La tecnología blockchain puede garantizar la transparencia y la trazabilidad de los procesos del comercio del agua. Estos incluyen: reciclaje, venta, compra, entrega y uso del producto. Conecta a todos los agentes implicados en la cadena de suministro: organismos públicos, instituciones, comunidades y centros de datos oficiales. Lo cual finalmente permite unificar los datos de acceso, los cuales son inmutables (no pueden ser alterados). Ayudando así a evitar burocracias, errores y manipulaciones posteriores.
Sistemas de pago
La tecnología Blockchain también puede utilizarse para crear sistemas de pago y recompensa que incentiven la conservación del agua o su tokenización. Por ejemplo, se podría establecer un sistema de recompensas para los agricultores que utilicen prácticas de riego eficientes y respetuosas con el medio ambiente. De esta manera, se podría fomentar el uso responsable del agua y reducir su desperdicio.
Seguimiento y verificación
Otra posible aplicación de la tecnología Blockchain en la gestión del agua es la creación de sistemas de seguimiento y verificación de la sostenibilidad de los productos que utilizan agua en su producción. Esto permitiría a los consumidores conocer el impacto ambiental de los productos que compran y tomar decisiones más informadas. Cada vez se demandarán más certificaciones del buen uso del agua como certificación en origen de la producción ecológica, la huella hídrica o la alta eficiencia.
En definitiva:
La tecnología Blockchain para la gestión del agua tiene un gran potencial para crear bases de datos descentralizadas, sistemas de pago y recompensa y sistemas de seguimiento y verificación. Este puede ser aprovechado para mejorar el uso del agua y fomentar prácticas más responsables y sostenibles. Sigue
nuestro blog para conocer más casos de uso de la tecnología Blockchain. Quizá quieras ver como la
Blockchain impulsa la economía circular.
